¿QUE ES EL AEROBIC?
Escuetamente puede ser definido como una serie de movimientos físicos, coordinados rítmicamente, que tienen como fin aumentar el tono muscular cardiaco y consecuentemente mejora todas sus prestaciones o funciones.
El vocablo "aerobic" significa "consumo biológico de oxígeno", Io que nos introduce en una serie de procesos metabólicos de la masa muscular de todo el organismo, pero muy especialmente de aquellos músculos que realicen un ejercicio rítmico durante un largo período de tiempo.
La práctica de cualquier deporte, de un ejercicio físico superior al habitual, determina en el organismo un aumento del ritmo de funcionamiento del corazón y paralelamente un incremento del consumo de oxígeno y de los movimientos respiratorios. Esta hiperactividad se produce fundamentalmente cuando se movilizan grandes masas musculares durante períodos relativamente prolongados de tiempo y a un ritmo adecuado, Io que no ocurre cuando en el ejercicio solamente están implicados cierto número de músculos realizando un trabajo parcialmente estático.
Estos "ejercicios completos" de aerobic "sensu estricto" los realizan todas aquellas personas que practican la natación, se ejercitan con la bicicleta, hacen "footing", remo o carrera, por poner algunos ejemplos, y por supuesto quienes efectúan "danza aerobic".
Como contrapunto a esta gimnasia completa, tenemos los ejercicios estáticos o "isométricos" destinados al desarrollo de cierto tipo de fuerza muscular, antes que la mejora armónica de las prestaciones cardíacas. Son, pues, categorías de entrenamientos diferentes para obtener finalidades distintas que deben adecuarse al estado físico del individuo.
Los movimientos aeróbicos, sobradamente conocidos en su expresión más espectacular, son excelentes para aumentar el aporte de oxígeno al corazón aun cuando suponen un gasto cardiaco de cierta consideración. El esfuerzo de su realización repercute más sobre la tensión arterial, aumentando la máxima, sin sobrepasar un cierto desarrollo del músculo cardiaco.
Los beneficios del aerobic como la práctica de cualquier deporte o ejercicio adecuado suelen obtenerse a "largo plazo": generalmente han de transcurrir algunos meses de práctica continuada para "notar algo" y en otros deportes el tiempo de espera es lo suficientemente largo como para desalentar a personas con pocas aficiones a la gimnasia y a la disciplina que requiere.
El aerobic-danza es en sí algo gratificante para un gran segmento de población comprendida entre los veinticinco y los cuarenta años, y según el número de practicantes en relación al sexo, más atractiva para las mujeres que para los hombres, si bien otras razones de ocupación y tiempo libre pueden influir en esta desigual distribución de sus adeptos.
Una de las ventajas primeras que se obtienen con el "aerobic" es la mejora de la forma física, manifestada por ciertos parámetros biológicos, antes alterados por la vida sedentaria de la mayoría de las sociedades desarrolladas de nuestro tiempo.
La insuficiencia pancreática de la edad madura, Ia alta tasa de colesterina también en personas de determinada edad, pueden aliviarse no de forma directa, sino gracias al desgaste que supone el trabajo rítmico de todas las masas musculares, dando lugar a un adelgazamiento o pérdida de peso que lógicamente reduce la tasa de colesterina y de azúcares en los individuos que, careciendo de contraindicaciones médicas, perseveran durante bastante tiempo con sus sesiones de aerobic.
Individuos con algún tipo de alteración coronaria manifestada que precisen volver a irrigar la zona lesionada del corazón, pueden practicar esta gimnasia, pero siempre de forma moderada y continuamente vigilados por su cardiólogo especialista, que será quien dictamine la bondad o no del deporte a ejecutar en función de la lesión sufrida y de las condiciones físicas del paciente. El desarrollo de la circulación colateral coronaria, mediante ejercicio regular y suave, permite una mayor supervivencia de personas entrenadas respecto de aquellas que no lo están y hacen una vida sedentaria después de haber sufrido un infarto de miocardio o una angina coronaria. En cualquier caso hemos de reiterar que estas estadísticas, más o menos fiables, en función del tamaño de la muestra y del segmento poblacional encuestado, no tienen en cuenta las características peculiares de cada individuo y por ello la decisión sobre la iniciación en algún deporte o ejercicio ha de basarse en exámenes clínicos y en el consejo del médico.
Sobre la hipertensión arterial, muy frecuente en los practicantes del aerobic, Ia pérdida de líquidos, el adelgazamiento y aumento de la sudoración. tienen efectos positivos al reducir la presión sistólica (la presión máxima).
En cualquier caso esta pérdida de líquidos y sus consecuencias beneficiosas actúan a largo plazo, con ejercicios continuos realizados durante largos períodos de tiempo.
No existe evidencia científica sobre el hecho del favorecimiento en la formación de células óseas por la realización de trabajos musculares que exijan un gran consumo de oxígeno, pero se ha observado que estos ejercicios fuertes y continuados, como el tenis, sobre el brazo del practicante asiduo de este deporte o la carrera sobre los muslos del corredor, favorecen el fortalecimiento de huesos situados en la zona de "trabajo": húmero, cúbito y radio en el tenista o fémur del atleta especializado en carrera.
Parece admitirse una relación directa entre la densidad o fortaleza del hueso y el grado de actividad muscular. De hecho, Ia inactividad opera ligada al debilitamiento del hueso: así como la densidad ósea disminuye con la edad, dando lugar a la osteoporosis de los ancianos, cualquier tipo de ejercicio adecuado puede retardar o disminuir la aparición de esta enfermedad, ya que en su desencadenamiento influyen también otros factores, además del desgaste orgánico producido por la edad.
